jueves, 20 de febrero de 2014

Misterio de la Vida y la Muerte

        Busca la Respuesta al Misterio de la Vida y la Muerte Tres tipos de almas reencarnadas son de particular interés para nosotros: nuestros amigos y aquellos a quien amamos; grandes almas y gigantes espirituales; y nosotros mismos. Cada cien años, alrededor de quince mil millones de personas mueren. Todos desaparecen y son olvidados, excepto aquellos grandes hombres y mujeres que dejaron una huella en la historia. Mantenemos ‘contacto’ con ellos a través de los recuerdos, de modo que siguen vivos en nuestro interior en forma de pensamiento. Pero, ¿dónde están físicamente hablando? ¿Dónde están los santos y los grandes ciudadanos del pasado? Dios me ha mostrado presentes encarnaciones de algunos de ellos. Algunos desempeñan papeles parecidos en la tierra. Pero Dios no quiere que se hable mucho de esto, ya que podría perjudicar a los actores en sus nuevos papeles.
      Tal vez por quien más nos preguntamos es por aquellos a los que amamos. ¿Dónde están?¿Por qué son apartados de nosotros? Tan solo una breve despedida y después desaparecen tras el velo de la muerte. Nos sentimos tan desvalidos y tristes; y no hay nada que podamos hacer. Aunque todas las almas nacen en familias de personas que no conocen, sus padres las aman; pero ellos no saben por qué. ¿Acaso estas almas son enviadas para causar dolor cuando desaparecen? Entonces, ¿nos es absurdo sentirse tan unido a ellas? Nunca sabes cuando la muerte la va a apartar de ti, o cuando la muerte se te va a llevar. Cuando alguien está muriendo piensa, ‘Estoy abandonando a mis seres queridos, ¿volveré a verles alguna vez?’ Y aquellos a quienes deja piensan, ‘Le estamos perdiendo. ¿Volveremos a encontrarnos alguna vez?’ Pensar eso es natural. Estos pensamientos nunca se nos hubiesen dado para no hallar una respuesta que satisfaga a nuestras almas. Es muy difícil conocer esas verdades. Esa es la causa de que no halles las respuestas. Cuando perdí a mi madre en esta vida, me prometí que nunca volvería a atarme a nadie. Di mi amor a Dios. Esta primera experiencia con la muerte fue muy dura para mí; pero a través de ella aprendí mucho. Busqué durante muchos meses y años hasta que hallé el misterio de la vida y la muerte, y si las almas se reencarnaban o no. Para vosotros es solo un pensamiento, una creencia, porque no tenéis ninguna prueba de ello. Pero yo no os hablo a partir de una simple creencia. Tengo pruebas de que existe vida después de la muerte. De ese modo puedo explicaros la verdad. Os cuento lo he experimentado. He hallado muchas almas en esta vida a las que ya había conocido antes. Puedo reconocer almas a las que me encontré en anteriores vidas. Os preguntaréis como. Dios me ha dado ese poder porque primero le busqué a El. Y le encontré. Cómo Reconocer Almas que Has Conocido en Otras Vidas Puedes reconocer almas que ya hayas conocido en anteriores encarnaciones. Por ejemplo, podemos relacionarnos con gente día tras día, pero aún y así nunca llegar a conocer o sentirte cercano a esa persona. Pero hay otros con quien sentimos una armonía inmediata desde el primer momento. No es algo físico. Es un recuerdo del pasado. La amistad es incluso mayor ahora. No acabó de definirse en la vida anterior y debe seguir evolucionando en esta. La amistad es la forma de amor más elevada. Y como tal, debe evolucionar hasta convertirse en la divina manifestación del amor eterno de Dios. En la amistad no existe coacción; nace de la libre elección del corazón. Si puedes ser un verdadero amigo para todos, entonces eso es amor divino. No muchos hallan verdaderos amigos en esta vida; simples amistades no deben ser confundidas con amigos auténticos. La amistad es una relación incondicional entre dos o más almas: pueden ser miembros de la misma familia, o una pareja, o no tener ninguna relación familiar. Se forma mejor entre personas que han hallado o buscan a Dios. Esa era la amistad que existía entre Jesús y sus discípulos. De otro modo, la amistad se reduce al plano del amor humano, apartando el alma de la amistad suprema con Dios. La verdadera amistad debe estar basada en las cualidades del alma, no en la atracción física u otras cualidades mundanas. Esto solo sucede cuando dejas de pensar que eres un hombre o una mujer. Si estás buscando tales amigos, reza a Dios: ‘Señor, guíame hacia aquellos que son amigos del pasado, para que así pueda continuar con la amistad que interrumpió la muerte. Envía esos amigos a mí para que así pueda ayudarles mediante mis pensamientos en Ti.’ Es un maravilloso ideal, ¿verdad? Utilizar la amistad para hallar a Dios. Solo en este plano de sincera amistad hallarás la felicidad con otra alma. No asistas a demasiadas reuniones sociales. Están bien de vez en cuando, pero relacionarte con mucha gente desperdicia tu valioso tiempo. Comparte pensamientos divinos con tus amigos. Utiliza tu tiempo para Dios. Intenta hallar almas que compartan el mismo objetivo que tú, el de alcanzar la amistad divina. El deber más importante que te ha dado Dios es el de desarrollar Su conciencia en tu interior y ayudar a los demás a hacer lo mismo.
            Mientras tu vida esté al lado de Dios, te traerá felicidad a ti y a los demás. De este modo, los amigo que armonizan espiritualmente contigo son muy importantes. No importa si hay diferencias entre tus opiniones y las de tus amigos, siempre habrá comprensión y comunicación. En esas relaciones, a pesar de los diferentes puntos de vista, siempre hay un respeto mútuo y amáis vuestra amistad por encima de todo lo demás. La verdadera amistad establecida en Dios es la única relación que dura siempre. En una ocasión, mientras viajaba en tren, me fijé en un hombre que estaba bebiendo y jugando a cartas. Entonces tuve la extraña sensación de que debía hablar con él. Me senté cerca de él y empecé a escuchar la llamada de su corazón. Entonces me levanté y cuando andaba por el pasillo, me miró y preguntó, ‘¿Puedo hablar contigo?’ Nos sentamos en un compartimento separado, solos, y hablamos durante una hora. Entonces le dije, ‘La bendición de Dios está sobre ti.’ El empezó a llorar y dijo, ‘Nunca más seguiré el camino equivocado.’ Muchos años después, nos encontramos en Arkansas. Estaba allí para presentarme antes de una lectura que yo iba a dar. Ante toda la audiencia, se puso a llorar y dijo: ‘La mayor bendición de mi vida fue una hora en un vagón de tren hablando con Swami Yogananda.’ No estoy hablando sobre mí, sino para demostraros lo potente que es la amistad del pasado. De modo que, cuandoquiera que conozcas gente, sé cuidadoso. Intenta interpretar tu primera reacción ante ellos. Esto te permitirá saber si ya conociste antes a esta gente. No es una emoción. Cuando sientes en tu corazón una profunda armonía con otra persona, entonces sabrás que os conocisteis en otra vida. Ayuda a los Enemigos del Pasado A través del Amor y el Perdón Por supuesto, también he hallado enemigos del pasado, pero mayoritariamente amigos. Recuerdo una vida, cientos de años atrás, cuando alguien a quien yo amaba mucho me traicionó y me hizo mucho daño. Volví a encontrar a esa persona en esta vida y otra vez me traicionó. Pero yo sólo he tratado de ayudarle. Por eso ya no me perseguirá más. El perdón es más poderoso que la venganza. Yo he perdonado a todos aquellos que con o sin saberlo, han intentado hacerme daño. Yo ya no deseo nada para mí mismo. He hallado esta felicidad en mi corazón porque he dado y he hecho todo para Dios. Aquellos que hacen el mal, se ahogan en su propia maldad. No pueden hacerte daño a menos que se lo permitas. Incluso nuestros enemigos son pruebas que debemos superar en esta vida. Recuerda que cuando alguien intenta hacerte daño es porque ya te lo causó en otra vida. Si sólo piensas en lo que te hizo y en lo terrible que es esa persona, estás cometiendo un error. Cuando piensas con odio, esa persona recibe los pensamientos y te odia el doble. Del mismo modo que el amor atrae, el odio también lo hace. Y tú no quieres que el imán de tu odio atraiga a tus enemigos. Nunca odies a nadie. El amor y el perdón tienen un efecto reparador en ti y en tus enemigos. Y recuerda ser agradecido por todos los maravillosos amigos que te ha dado Dios. Nunca intentes imponer tu amistad en nadie. Yo doy mi amor a todo el mundo; y a aquellas almas que están en armonía conmigo, les doy mi amistad incondicional. Cuando yo recibo lo mismo, me alegro, porque en esa amistad se halla la manifestación de Dios. Busca a Dios: Te Mostrará Imágenes de Tu Pasado Recuerdo mis anteriores encarnaciones. En la Torre de Londres, por ejemplo, descubrí ciertos lugares que ya había visto en una vida pasada, lugares de los que mis padres en esta encarnación no sabían nada. Y como en otra vida había sido inglés, cuando era niño, en la India, solía comer con cuchillo y tenedor. Cuando mi familia me preguntaba porque comía así en vez de con los dedos, como es la costumbre india, yo les respondía, ‘Recuerdo esto del pasado.’ Ellos no lo entendían, pero yo sabía que había comido de aquella forma en otro tiempo. Tales recuerdos del pasado os asaltarán a medida que avancéis espiritualmente. Dios te mostrará esas imágenes. Y cuando esto te interese menos y tu mente contenga sólo a Dios, sabrás aún más.
                Recuerda, has sido enviado a la tierra para destruir las malas tendencias y los hábitos que llevas contigo a través del tiempo, y para evitar que vuelvas a crearlos, de manera que puedas hallar a Dios. Entonces podrás decir, ‘Señor, he cumplido el propósito de mi vida. No tengo que regresar a la tierra nunca más a no ser que quieras que Te sirva.’ Como dijo Cristo, ‘Al que salga victorioso, lo haré columna en el santuario de mi Dios y no saldrá ya fuera jamás.’* Debes buscar a Dios ahora; no esperes encarnaciones para encontrarle. Puede ser hallado en esta vida –ahora. Y cuanto más rápidamente le conozcas, mejor estarás. Es absurdo no buscarle, porque no hay ninguna otra manera de estar satisfecho. Si Le tienes a El, lo tienes todo. Si Haces el Esfuerzo, Hallarás a Dios Nadie puede entregarte a Dios. ¿Por qué tendría que venir si tú no haces un esfuerzo para alcanzarle? Debes amar a Dios con el corazón, con la mente, con el alma. Debes demostrarle que le quieres al cien por cien, entonces vendrá. El deseo hacia Dios que sientes en esta vida lo has tenido en una vida anterior. Esto os lo puedo asegurar. Debes alimentar ese deseo para que crezca y puedas alcanzarlo. Nunca sabes cuando vas a desaparecer de esta vida y volver a comenzar como un bebé indefenso. Pasarán muchos años antes de que vuelvas a sentir ese deseo por el Infinito. ¿Cuántos de vosotros hacéis un esfuerzo espiritual sincero? Escucháis mis charlas, pero ¿realmente intentáis alcanzar a Dios? Si lo intentaseis sinceramente lo podríais hacer. Hace falta tiempo y fe persistente. Si dejas de llamarle porque crees que no te escucha, será tu fin. Estás andando por esta tierra como si de un sueño se tratase. Nuestro mundo es un sueño dentro de un sueño; debes darte cuenta de que hallar a Dios es el único objetivo, tu única meta. Existes sólo por Dios, y a El es a quien debes encontrar. Y sólo le encontrarás si le buscas constantemente; con firme resolución de tu mente, equilibrio en tu temperamento; hallando faltas en ti, no en los demás; aprendiendo en el camino de la sabiduría; siendo humilde, siempre leal a tus amigos y benefactores, apreciando la sinceridad en todos los corazones, cooperando siempre con el bien y resistiendo el mal, ayudando a los demás, entregando fuerza y comprensión a lo largo del camino – esta es la forma de vivir, el verdadero camino que te conduce a Dios. No debe importarte si conoces o no el mundo; busca la aprobación de tu propia conciencia y así conocerás a Dios. Estar satisfecho y hacer poco o ningún esfuerzo es como estar estancado. Pero intentar progresar incesantemente, hasta que estés seguro de haber hallado a Dios, es el modelo según el cual debes vivir. Cuando Dios Llega, el Velo del Engaño Desaparece Este mundo es un lugar imperfecto. Cuando aparece la prosperidad, estalla la guerra y envía a la humanidad a la pobreza. Pero no debes tomar los altibajos de la vida muy en serio. Sin importar lo que suceda debes decir: ‘Todo está bien. Sólo estoy soñando en el sueño de Dios – nada puede afectarme. Soy feliz. Nada me mantiene atado. Estoy listo cada minuto para salir de este sueño o quedarme para cumplir con Tu voluntad.’ Y entonces serás libre. Todo lo que haces con el pensamiento fijo en Dios es muy distinto a lo que haces sin El. El otro día fui a ver una película y lo primero que recuerdo es que entre ensamadhi. Alguien me preguntó, ‘¿No está viendo la película?’ ‘Sí’ le respondí, ‘las dos películas – una dentro de la otra.’ El cine, cada fotograma, la gente sentada a mi alrededor – lo veía todo como si de películas proyectadas en la pantalla de mi conciencia se tratase. Cuando Dios llega, el velo del engaño desaparece y conoces la respuesta a todo lo que quieras saber. En ese estado de conciencia he visto a lo lejos, en el pasado y en el futuro. Generalmente cierro mis ojos a esas cosas, pero cuando me interesan las veo. También puedo ver las almas de los que vienen. Nadie puede decepcionarme. Conozco a todos por dentro, pero nuca hablo sobre ello; no estoy interesado en la parte mala de las personas, solo en la parte buena. Yo no animo a las multitudes que buscan curiosidades, pero sí a las almas verdaderas que buscan el romance divino. ¡Tanta alegría, tanta felicidad! Tener el amor y la protección del Divino es el mayor de los éxitos, y tú puedes encontrarle haciendo un pequeño esfuerzo.